El
coro de nuestra parroquia de Madre de Dios se presentó el pasado
sábado al XXV Festival de la Canción Misionera en Cádiz.
Un
coro que nació desde la JMV, quizá hace más de 25 años para
amenizar aquellas primeras Eucaristías de niños que empezaban a
celebrarse en Madre de Dios. Por el que han pasado algunos referentes
importantes de la canción litúrgica y en el que han tenido cabida
todos aquéllos que se han querido acercar a compartirte, Señor,
desde los bancos a la derecha del Presbiterio.
Hoy,
el Coro está compuesto por personas que son esenciales para todos
nosotros y por gente proveniente de JMV, aunque siguen de alguna
forma vinculados a Juventudes porque las primeras experiencias que
nos alumbran a la Fe, permanecen para siempre; y también por
miembros de CVX.
Dos
carismas: el Ignaciano y el Vicenciano, dos caminos de espiritualidad
con una piedra angular que los une en el Señor de la Vida y Padre y
Madre de todos: La Misión. Y así, unidos en la Misión se trajeron
como Coro de la Parroquia de Madre de Dios, el premio al mejor
conjunto de voces del XXV Festival de la Canción Misionera que
ofrecen como testigos de Tu Palabra orada, vivida y cantada.
