Con espíritu de acción de gracias, la comunidad parroquial de
Madre de Dios nos reunimos, el pasado 27 de agosto, para agradecer a Dios el
ministerio sacerdotal de Antonio Luis y el tiempo que ha ejercido como párroco
nuestro. Un tiempo que a todos nos parece corto pero que ha sido suficiente
para que su entrega nos haya hecho sentirnos
Iglesia.
Pedimos por los frutos de su vida
sacerdotal y de la misión que la Iglesia le encomienda. A ejemplo de María,
convertimos cada uno de nuestros sentimientos en oración en comunión con la
ofrenda eucarística de Cristo.
Como durante todo este tiempo, el Señor nos
bendijo con la presencia de Ignacio y de nuestro Seminario Diocesano.
Fue una celebración preparada con mucha
ilusión y cariño, y vivida con gran emoción por parte de los que allí
estábamos.
Agradecemos a nuestro párroco Antonio Luis y
también a Ignacio haberse dejado ser
instrumento del Señor.
Gracias también a todos los que habéis hecho
posible esta Celebración, especialmente a Pablo (párroco de Prado del Rey) por
su implicación y la ayuda prestada (disfrutó al igual que nosotros como un
niño) y por haber ayudado todos a que ésta fuera una sorpresa, el esfuerzo
mereció la pena.
Te seguiremos teniendo presente en nuestra
oración, que el Señor te siga guiando en
tu caminar y te ayude a continuar trabajando con la misma alegría, ilusión, generosidad
y fidelidad a Él.
Ese día fue especial ,lo vivimos con intensidad por un lado con alegría por darle una sorpresa a nuestro párroco Antonio Luis y con un poquito de pena ( somos personas ) y dos años nos ha sabido a poco ,seguro que en su nueva misión dará todo de sí mismo como ha hecho con nosotros.Han sido dos años en los que hemos estado muy unidos tanto a Antonio Luis ,a Don Ignacio a nuestros seminaristas que algunos ya son sacerdotes , muchas gracias por este tiempo ,por su dedicación, por su atención hacia su parroquia y esperamos seguir viéndolo aunque no sea nuestro párroco
ResponderEliminarSin duda fue un gran día dando gracias al Padre (como dice el título del artículo). Antonio Luis, Ignacio y los seminaristas han sido en estos dos años un regalo del Amor de Dios para nuestra parroquia. Ellos han sido fermento de unión entre nosotros y han desarrollado más que satisfactoriamente su labor de pastores. Que el Señor siga bendiciéndolos todos los días de su vida y allí donde vayan sigan transmitiendo con su entrega el Amor del Padre. En nuestros corazones siempre tendrán un lugar privilegiado.
ResponderEliminarMuchísimas gracias a vosotros. Es una muestra más de la acogida y generosidad para conmigo. Falta nos hace la oración , y os lo agradecemos. Nos seguimos viendo de una u otra manera. Gracias!
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