domingo, 5 de marzo de 2017

Cuaresma, tiempo de desierto

Jesús es hombre. Jesús acude al desierto, un lugar sin caminos para encontrar su camino. Ante tantas opciones de poder, vanidad, idolatría, codicia, egoísmo, Jesús decide ser fiel, alimentarse de la Palabra del Padre y a Él solo adorar. Ser servidor. Ser Alimento. Ser Pan. Ese es el camino.
¿Cómo van nuestros desiertos? ¿Nos dejamos enredar por caminos que conducen a mitificar nuestro yo? ¿Qué papel juegan los pobres de verdad en nuestra vida? ¿Somos pan para los demás? ¿Estamos dispuestos a dejarnos triturar por amor? ¡Cuántas preguntas! Cuaresma es tiempo de desierto.
Fernando Cordero, sscc.