En
la Navidad no sólo recordamos que Dios se hizo hombre en Jesús de
Nazaret, celebramos también que sigue llegando a nuestro mundo hoy
cuando vivimos una realidad que nos desgarra. Contemplamos al Hijo de
Dios nacido en los «suburbios» de Belén, para descubrir qué es lo que
hoy nos quiere decir esa presencia siempre viva y actual. Al mirar a
Jesús recién nacido en la pobreza no podemos apartar de nuestro corazón a
todos los otros niños y personas que están hoy en una situación
parecida. Al lado de ellos se situó Jesús desde el primer momento de su
vida, y al lado de ellos sigue.
Por eso su venida es una buena noticia, una gran alegría, para los
pobres…
Extraído de Taller de oración
Os recordamos que mañana 24, celebraremos la Eucaristía a las 20.00h