En vela ante la Virgen
de Montserrat, en la madrugada del 24 al
25 de marzo de 1522, el caballero guipuzcoano Iñigo
de Loyola,
que 12 años más tarde fundaría la Compañia de Jesús,
confirmó la decisión de abandonar su vida de gentilhombre y
soldado para dedicarse al servicio de Dios. Pocos meses antes,
durante la convalecencia de una herida de cañón producida en
la defensa de Pamplona,
la lectura de la Vita Christi ya
le había inducido a replantearse su futuro y se propuso
peregrinar a Jerusalén.
Pero, llegado a Barcelona,
hizo un alto en el camino y buscó en la imagen venerada en la
abadía benedictina la inspiración que resultaría clave
para su destino. Aquella experiencia religiosa hizo que el mismo día
abandonara sus nobles ropajes y, cubierto de harapos,
buscara refugio en una cueva de la
cercana villa de Manresa. Allí,
durante diez meses de meditación y ascesis, elaboró los
Ejercicios
Espirituales, base teórica de
la conducta religiosa ignaciana difundida por los jesuitas.
El
Papa Pablo III confirmó oficialmente a la Compañía de Jesús por
la bula «Regimini militantis Ecclesiae» el 27 de septiembre
de 1540
Ignacio de Loyola, fallecido en Roma en
1556, sería canonizado en 1622
¿Qué deseo interior impulsa a un hombre
a abandonar vida y hacienda y lanzarse a una aventura de conversión
de consecuencias impredecibles que a la postre se revelaron como
fuerza modificadora en la historia del mundo?
La figura de Ignacio de Loyola, fundador
de la Compañía de Jesús, es el eje central de este primer año del
SEMINARIO DE ESPIRITUALIDAD IGNACIANA
que la Parroquia de Madre de Dios ofrece a todos los que se sientan
atraídos por esta particular forma Espiritual de conexión con el
Creador.
Todo ello a través de un documento base:
EL PEREGRINO: su autobiografía, escrito dictado por el mismo Ignacio
a un compañero -Gonsalves da Cámara-, tres años antes de su
muerte. Ignacio, al hablar, siempre se refiere a sí mismo en tercera
persona como "El Peregrino".
La estructura se articulará en torno a
una sesión inicial --que tendrá lugar el
próximo día 16 de Octubre a las
20.30 horas-- y tres sesiones
de trabajo a lo largo del curso, ayudados de varios textos
complementarios que nos aproximarán desde otros ángulos a la figura
de Iñigo de Loyola, su entorno vital y sus condicionantes para
descubrir en nuestra propia Historia de Salvación, elementos
identitarios con el proceso de un hombre que cambió la historia de
La Iglesia.
También contaremos con un foro específico
en internet como soporte de un Seminario que da sus primeros pasos
con vocación de continuidad en nuestra Parroquia.
El número máximo de participantes en el
SEMINARIO será de aproximadamente 25 personas para conseguir que sea
manejable y dinámico.