"Dios nos ama más de lo que nosotros nos amamos, que cree en nosotros más que nosotros mismos.
Qué difícil es acoger realmente a Jesús, qué duro es aceptar a un «Dios, rico en misericordia.
No tengáis miedo, pensad en las palabras de estos días «Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
No os desaniméis: con vuestra sonrisa y vuestros brazos abiertos predicáis la esperanza.
Con esta mirada de Jesús, podéis hacer surgir una humanidad diferente" .
Esa alegría que habéis recibido gratis de Dios, dadla gratis, porque son muchos los que la esperan.
La JMJ, podríamos decir, comienza hoy y continúa mañana, en casa, porque es allí donde Jesús quiere encontrarnos a partir de ahora.
El Señor no quiere quedarse solamente en esta hermosa ciudad o en los recuerdos entrañables, quiere venir a tu casa, vivir tu vida
Él espera que, entre tantos contactos y chats de cada día, el primer puesto lo ocupe el hilo de oro de la oración
Cuánto desea que su Palabra hable a cada una de tus jornadas, que su Evangelio sea tuyo, y se convierta en tu «navegador»"
Papa Francisco