«Respondió María: He aquí la esclava del Señor. Que se cumpla en mí según tu palabra» (Lc 1, 38) |
Te fiaste. Sin sucumbir al temor, a las prevenciones, a lo sorprendente. Te fiaste de Dios, aunque hacerlo te pusiera en situaciones complicadas. Dijiste «sí», poniendo tu vida en sus manos, sin hacer caso a las habladurías, a las posibles incomprensiones. Y esa palabra valiente se convierte, también hoy, para mí, en llamada. A tener valentía a la hora de vivir la fe. A tener coraje para tomar en serio el evangelio. A tener audacia para buscar formas de hacerlo real en este mundo, hoy, aquí y ahora.
¿Qué «Hágase» es necesario hoy en mi vida? |
Extraído de www.pastoralsj.org